Homenaje a Juan Antonio Saiz Huélamo
El pasado 23 de enero nos dejó Juan Antonio Saiz Huélamo, un referente de la discapacidad visual en la provincia de Guadalajara.
Juan Antonio nació el 2 de octubre de 1956 y estuvo ligado a la ONCE desde su juventud. A lo largo de su carrera difundió los valores de la Organización y fue un gran ejemplo en la comunidad.
Siendo adolescente, en los años 70, perdió la visión y comenzó a estudiar en el colegio de la ONCE en Madrid. Tras finalizar sus estudios, comenzó su relación laboral como Centinela de la Ilusión y se unió a los grupos de afiliados que iniciaban la democratización de la entidad, siendo testigo directo de uno de los momentos históricos más importantes para la ONCE y para las personas ciegas del país.
En 1989 asumió la Vicepresidencia del Consejo Territorial de la ONCE en Castilla-La Mancha aunque, por circunstancias familiares, al año y medio tuvo que dar el relevo para pasar más tiempo con su esposa y sus hijas.
Tras este tiempo de conciliación, en 1995, Juan Antonio tomó el papel de Director de la Agencia de la ONCE en Guadalajara, puesto en el que estuvo hasta el 2011. Saiz estuvo 16 años al frente de la agencia, la cual tuvo una gran evolución, y aseguró que gracias a la ONCE pudo vivir perfectamente y le permitió realizarse laboralmente, “he dado también todo lo que he podido y he sido feliz”, contaba tras su jubilación.
No obstante, Juan Antonio continuó ligado a la ONCE y siguió trabajando por los derechos de las personas ciegas y con discapacidad de la región durante 8 años más como coordinador territorial de la Sección Senior de Unidad Progresista de la ONCE (SUPO).
A lo largo de estos años, Juan Antonio tendió muchos puentes entre la ONCE y las distintas asociaciones de la discapacidad en la provincia de Guadalajara, participando en cuantas plataformas, encuentros y órganos institucionales se creaban para recoger las necesidades del colectivo en la provincia con el Ayuntamiento de la capital o de los demás municipios como Azuqueca de Henares, Cabanillas, etc.
Juan Antonio fue un ejemplo de generosidad, honestidad y lucha de los valores de la ONCE, encarnando la frase de “no mirar a otro lado cuando se presentaban las dificultades”, tendiendo su mano y acogiendo a quienes se acercaban a la ONCE de Guadalajara.
Gracias amigo. Descansa en paz.
